Los servicios de un Agente Aduanal proporcionan bajos costos, reducir tiempos logísticos y cumplir con lo dispuesto en la Ley; objetivos que se buscan al importar o exportar por lo que son contratados por las empresas para llevar a cabo el despacho indirecto de mercancías.
Con la última reforma a la Ley Aduanera se enfatizó el derecho de las empresas de realizar sus despachos aduaneros de forma directa nombrando a un representante legal para dicha actividad.
Es importante no confundir al representante legal de la empresa el cual tiene la responsabilidad de ejercer los poderes que se le concedan en el instrumento correspondiente, con aquel que se designará para el despacho aduanero de sus mercancías.
Si las empresas optan por una figura de despacho directo, el importador o exportador, deben tener en cuenta que son ellos los que tienen la responsabilidad ilimitada de los actos de sus representantes como puede ser errores u omisiones que se deriven del despacho aduanero o por incorrecta clasificación arancelaria. De lo contrario, si las empresas optan por contratar una figura de despacho indirecto y utilizan un agente aduanal, estos serán los responsables solidarios dejando bajo su cargo el despacho aduanero de mercancías y la logística.
La figura del Agente Aduanal se considera una ventaja competitiva empresarial ya que cuentan con herramientas de seguridad que ayuda a la empresa en el cumplimiento de sus obligaciones aduaneras y fiscales.