Estados Unidos designó a China como “manipulador de divisas” luego de que autoridades chinas admitieran depreciar su moneda en reacción a la declaración del presidente Donald Trump de imponer el 10% de aranceles a los productos de la potencia asiática a partir del 1 de septiembre, “la injusta ventaja competitiva” colocó al yuan en cifras mínimas históricas no vistos desde el 2008, rebasando las 7 unidades por dólar estadounidense. Las implicaciones hinchan injustamente las exportaciones debido a un abaratamiento en los productos chinos. A demás atribuir de “manipulador de divisas” a un país incide en “prácticas desleales” ya que los estragos son de alcance internacional, para china los problemas recaen en un escaso poder adquisitivo en los ciudadanos, empresas y perdidas de inversiones.  Sin duda esta guerra comercial está presentando un gran riesgo para la economía mundial.