El Grupo Alianza Estratégica Portuaria (GAEP), quien es pionero en el uso de varias herramientas aduaneras para agilizar el movimiento de mercancías, actualmente promueve el régimen de Transito Interno desde las principales puertas de entrada de mercancías en el Pacífico mexicano.

El transito interno es descrito por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) como aquel que “consiste en el traslado de mercancías, bajo control fiscal, de una aduana nacional a otra”, ya sea para importación o exportación de mercancías.

Una vez descargada la mercancía del barco (aun en contenedor y con sus respectivos sellos) se aplica la clave de pedimento T3 en la aduana, de Transito Interno, para poder transportarlas sin mayores revisiones vía ferrocarril, el más utilizado por cuestiones de seguridad, hasta la aduana de destino.

El Tránsito Interno permite a las empresas ahorrar en costos de almacenaje en puertos y tiempo al tener sus productos más rápido en sus centros de venta o productivos, al realizarse el despacho aduanero en puntos menos saturados.

El GAEP ha centrado su servicio en las mercancías de importación que llegan a los puertos marítimos de Lázaro Cárdenas (Michoacán) y Manzanillo (Colima), los principales puntos de entrada. Mientras que San Luis Potosí, Toluca, Pantaco, Monterrey y Guadalajara se encuentran en la red de aduanas de cierre que ha construido para este servicio.